Dentro
de su homilía dominical, el Arzobispo primado de México, Norberto Rivera,
afirmó que las prácticas de espionaje han hecho que el miedo social se
prolifere.
“No
es una exageración constatar que crece entre nosotros el miedo social de que
somos espiados, de que nos están hackeando, la necesidad de defendernos, de
buscar seguridades, le tenemos miedo hasta al vecino”.
Es
por eso que hizo un llamado a renovar las estructuras e instituciones
encargadas de la seguridad nacional, pero enfatizó que eso no sería suficiente,
pues para que se genere un cambio verdadero debe haber fe.
“Necesitamos
fe, pues la fe es quizá, antes que nada, fuerza contra todo miedo y osadía para
seguir creyendo”.
Dentro
de sus oraciones dio un espacio para pedir por los jóvenes que concluyeron sus
estudios universitarios a los cuales les dirigió un mensaje. “para que no se
les olvide que han sido educados para mejorar a la sociedad y no para ser
factores de división y de discordia”.
Por
otro lado, para los pobres, para los faltos de pan, de amor de ternura y de
solidaridad, se elevó una súplica “para que puedan encontrar las manos
generosas que son miedo les puedan ayudar en sus necesidades.
No
obstante, también dedicó un espacio para hablar sobre los políticos corruptos,
los cuales serían excomulgados por el daño severo que le ha generado a la
población, basándose en las malversaciones del gasto público, viéndose los más
pobres en un estado de vulnerabilidad total.
Esta
semana, la editorial del periódico Desde la Fe, publicó lo siguiente con
respecto al tema político. “Especialistas de la Santa Sede analizan la
viabilidad para aplicar la máxima e las penas a estos políticos rapaces, a fin
de sensibilizar a la sociedad de la gravedad de sus actos: la separación del
cuerpo eclesial, es decir, la excomunión de los corruptos”.
Con
información de 24 Horas
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